Boris Johnson con los días contados como primer ministro

Rápido, cambien las guardas. Foto: Político

Los jefes de gobierno pueden afrontar crisis severas cuando enfrentan escándalos, cuando sus niveles de aprobación son muy bajos o cuando pierden el respaldo político de su partido. En el caso de Boris Johnson, se cumplen las tres condiciones y su permanencia como primer ministro está en ciernes. Un abrumador 71% de los británicos desaprueba la gestión de Johnson y ayer un nuevo escándalo se sumó al del partygate, lo cual produjo un éxodo masivo de ministros y altos funcionarios conservadores que se apartaron del gobierno por considerar imposible seguir defendiendo lo indefendible. 

El escándalo de Pincher

El nuevo escándalo empezó a cocinarse el pasado jueves cuando Chris Pincher tuvo que renunciar a su cargo como el número dos del grupo parlamentario conservador luego de que se conocieran denuncias en su contra por conducta sexual inapropiada. El escándalo no lo produjo el comportamiento reciente de Pincher, sino el hecho de que se hizo claro que Boris Johnson sabía de acusaciones formales que le acarrearon sanciones a Pincher por acoso sexual a jóvenes asesores y colegas. A pesar de saber esto, Johnson lo nombró en su cargo el pasado febrero porque necesitaba funcionarios leales que le ayudaran con la disciplina parlamentaria. Así, el principal problema es la sensación de que Johnson y su equipo acomodan la verdad según su conveniencia, lo que aumenta la sensación de desconfianza e incompetencia del gobierno.

Las renuncias

El ministro de salud, Sajid Javid fue el primero en renunciar, seguido a los pocos minutos por el ministro de hacienda, Rishi Sunak. Javid señaló que se apartaba de su cargo porque los británicos esperaban que su gobierno fuera íntegro, implicando, por tanto, que no lo era. Igualmente, Sunak sugirió que el gobierno del que se apartaba no se comporta de forma “adecuada, competente y seria”. La cascada de renuncias continuó con las de cuatro secretarios privados del parlamento, el vicepresidente conservador, dos enviados comerciales y el procurador general.
Pese a haber nombrado ya los reemplazos en las carteras de hacienda y salud, los días de Johnson al frente del gobierno parecen estar contados. Hace sólo un mes sobrevivió un voto de no confianza de su partido; este nuevo golpe le deja peor parado aún, en especial teniendo en cuenta que una encuesta de ayer en la tarde reveló que el 69% de los británicos consideran que debe renunciar.

Recibe newstro boletín gratuito

Newspresso te ofrece una selección cuidadosa de las noticias más relevantes de Colombia y el mundo para que empieces tu día con los ojos bien abiertos.

Noticias relacionadas