
Muqtada al-Sadr es un tipo intransigente y está detrás de la actual crisis en Irak. En semanas recientes el país ha vivido dos invasiones de manifestantes al Parlamento como protesta ante la posibilidad de que este órgano eligiera a un candidato a primer ministro con tendencia proiraní, Mohamed Shia al Sudani. Justo después, el poderoso líder chiita, reconocido como agitador “antipolítica tradicional” exigió que se disolviera el parlamento y se dieran elecciones anticipadas para volverlo a constituir desde sus bases.