
Para completar la “derrota aplastante”, como ha sido llamado el resultado, varios ministros de Macron, que buscaban su reelección, perdieron sus curules y deberán abandonar sus cargos, entre ellas las titulares de Transformación y Servicio Público y de Salud. Macron se verá abocado a transar con dirigentes de izquierda y de derecha para poder llevar a cabo las reformas que había prometido, como la reforma pensional, la cual por ahora está en vilo.