
Una investigación periodística del medio The Telegraph reveló que una mafia albanesa que opera en Ecuador recluta a jóvenes y niños para convertirlos en criminales, por medio de procesos de enseñanza delincuencial situados en los barrios más pobres de Guayaquil. Los delincuentes albaneses llevan varios años en disputa con las pandillas locales por el poderío de las principales rutas de envío de drogas a Europa.
Además de tener el control total del flujo de drogas hacia otros continentes, la mafia se ha concentrado en crear y fortalecer unas “escuelas de sicarios” en barrios marginales de Guayaquil para enseñarle a los menores cómo manipular armas, asesinar y mover droga.
La mafia albanesa también recluta jóvenes para convertirlos en narcotraficantes y llevarlos a Europa. Aunque las autoridades de Ecuador están enteradas de la situación, hasta el momento no han podido generar estrategias con verdadero alcance para solucionar el problema, que ha encontrado su punto más álgido en el transcurso de este año.