
El Premio de Ciencias Económicas del Banco de Suecia en Memoria de Alfred Nobel —conocido coloquialmente como Nobel de Economía— fue entregado, conjuntamente, a Ben S. Bernanke, Douglas W. Diamond y Philip H. Dybvig. Los galardonados reciben el reconocimiento por sus investigaciones sobre bancos y crisis financieras.
La Gran Depresión de la década de 1930 paralizó las economías del mundo durante muchos años y tuvo graves consecuencias sociales. Gracias a lo conseguido por este trío de economistas e investigadores estadounidenses, el mundo ha podido manejar mejor las crisis financieras posteriores, más que nada porque ayudaron a mejorar el entendimiento general que se tiene sobre la importancia de los bancos para la economía; proporcionando, además, herramientas para prevenir colapsos bancarios generalizados, como lo son los fondos de garantía de depósitos que dejan a los gobiernos como prestamistas de último recurso.