
Este semana Corea del Norte inició una nueva prueba de misiles y vuelos militares cerca de la frontera con Corea del Sur, lo que ha ocasionado que se eleve la tensión entre los dos países. Un portavoz del ejército norcoreano afirmó, luego de seis meses de silencio sobre las pruebas de misiles, que los ejercicios recientes se ordenaron luego de que el ejército de Corea del Sur ejerciera acciones de “provocación” en la frontera.
Kim Jong Un, afirmó ayer que sus fuerzas de combate nuclear están totalmente preparadas para una guerra real en la que tengan que poner a los enemigos “bajo su control”. Por otro lado, el portavoz del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, Kim Jun-rak, afirmó que Corea del Norte habría lanzado dos misiles de crucero desde la provincia de P’yŏngan del Sur en la madrugada del miércoles, lo que llevó a Seúl a enviar varios aviones de combate F-35A a la zona. Según las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, las fuerzas militares norcoreanas tienen prohibido probar misiles balísticos, sin embargo, esta prohibición no aplica para los misiles de crucero. Hay mucha tensión frente a la posibilidad de que Pyongyang realice un nuevo ensayo nuclear. El último ocurrió en 2017.