
Un grupo de científicos de la Universidad de Aix-Marsella de Francia, revivió casi dos docenas de virus que permanecían congelados hace más de 48.500 años en Siberia; se trata de bacterias que datan de hace mucho tiempo, dentro de las que se encuentra “zombi”, el virus más antiguo del que se tiene registro. Así las cosas los expertos advierten que el deshielo del milenario —pero destructible— permafrost, atribuido al cambio climático, podría representar una nueva amenaza para los seres humanos.
Según el informe entregado por los investigadores, el deshielo provocado por el calentamiento global está liberando materia orgánica congelada desde hace un millón de años que, en su mayoría, suele descomponerse en dióxido de carbono y metano —lo que termina aumentando el efecto invernadero—. No obstante, la parte restante suele estar compuesta por microbios celulares que “reviven” después del descongelamiento y virus que permanecieron latentes desde el periodo prehistórico.
Pero, ¿es un peligro el virus zombi?
Cada que salen a la luz estos tipos de estudios se genera una controversia alrededor del método usado. Esto es porque los científicos no sólo suelen estudiar los virus y organismos microcelulares que encuentran en el permafrost, sino que los “resucitan” para después replicarlos en un laboratorio. Aunque a simple vista lo anterior parezca no ser más que un procedimiento peligroso, el objetivo de los investigadores es, precisamente, el de analizar el potencial peligro que pueden representar para la salud humana, intentando, además, prever posibles consecuencias de la salida a la superficie de las bacterias.
Puntualmente, el “zombi” descongelado en Siberia pertenece a la familia de los pandoravirus, un tipo de afección particular que sólo infecta a las amebas y, quizá, también a otro tipo de organismos unicelulares que se le parezcan. No obstante, a pesar de su carácter inofensivo, los hallazgos arrojados por el estudio de los científicos sí sirven como una alarma para el futuro. Según Jean-Michel Claverie —uno de los investigadores a cargo—, si este tipo de organismos pueden ser revividos sin haber perdido su carácter infeccioso después de haber estado congelados por tanto tiempo, otros tipos de bacterias y enfermedades virales de mamíferos también pueden serlo.